4ºC - Anastasia Nieto
A pesar de las posibles diferencias, prejuicios, problemas, guerras... nunca vamos a dejar de ser humanos ni de tener los mismos derechos, siempre seremos iguales por mucho que nos empeñemos en creer lo contrario. Una vez que dejemos atrás todo aquello que defendemos y nos produce odio o rivalidad hacia otras personas, finalmente seremos felices, encontraremos algo mucho más valioso (el amor, la amistad, el respeto mutuo...) que nos enriquece como personas más que cualquier otra cosa. Valemos mucho más que unos simples ideales que se van transmitiendo poco a poco, somos personas, y no debemos rebajarnos.
